Los sacramentos son signos característicos para poder ayudar a los creyentes a alcanzar el reino de Dios. Los sacramentos son 7 y están conformados por el bautismo, la confirmación, la eucaristía, la penitencia, la unción de los enfermos, el orden sacerdotal y el matrimonio.
Cada sacramento va manifestándose en la vida de cada persona de acuerdo a la etapa en la que este se encuentre, siendo el primero de ellos el bautismo el cual es el sacramento por el cual nos podemos hacer hijos de Dios, además de limpiarnos del pecado original y hacernos miembros de una Iglesia.
Tipos de bautismo
Existen diferentes tipos de bautismo, entre ellos está el más común que es el de agua y es el bautizo recibido por todas las personas, también entre la categoría del sacramento del bautismo entra el bautismo de sangre el cual es aplicado a los mártires que han muerto por defender su fe, mientras que el bautizo por deseo es aquel que se le proporciona a personas que han muerto sin ser bautizadas pero que hayan manifestado el deseo de ser bautizados.
Así pasamos al sacramento de la confirmación en la cual se manifiesta la gracia de recibir al Espíritu Santo nuevamente y que permitirá que luego de haber sido bautizados puedas renovar todas las promesas bautismales. Este sacramento depende exclusivamente de quien lo recibe pues tendrá la potestad de aceptar seguir por sí mismo a Cristo.
Otros sacramentos
De esta manera también te podrás topar con sacramentos como la penitencia o la confesión la cual se hace a través de un sacerdote y funciona para acercarte más a Dios y para arrepentirte de las faltas que hayas cometido.
Mientras que también podrás ver sacramentos como el matrimonio, cuyo fin busca unir a un hombre y a una mujer y convertirlos en una sola persona.