Magia blanca para tener un hombre a tus pies

Utilizar magia blanca para tener un hombre a tus pies, quizá no sea tan efectivo como la magia negra, pero cuenta con el beneficio de que no se correrá el riesgo de que la magia se devuelva en contra de la ejecutora. Sin embargo, para obtener buenos resultados es recomendable tener en cuenta algunas consideraciones.

Tener a un hombre a tus pies mediante magia blanca con éxito

Al igual que con otros hechizos, algunas cosas importantes deben tomarse como una advertencia, de modo que se pueda evitar cualquier efecto secundario. En primer lugar, debes centrar tus propias emociones en tu amor y asegurarte de que no hay nadie en tu vida excepto el hombre que amas, que tus pensamientos no fluctúen nunca y que no puedes tener dos o más amantes en tu mente al mismo tiempo.

Por lo tanto, la limpieza de la mente y el alma es una regla fundamental para empezar tener a un hombre a tus pies, incluso un buen brujo debería pedirte que decidas si quieres pasar toda la vida con tu amante o sólo deseas a tu amante para el entretenimiento sexual. Sólo mediante amor verdadero y puro puede funcionar la magia blanca para tener a un hombre a tus pies.

Hacer el conjuro

Normalmente se requiere un poco de aceite para frotar la piel y sentir el verdadero calor del amor. Se puede usar un perfume para instigar la energía positiva y encender las llamas del amor dentro de la mente y el alma del amante.

Los hechizos se pronuncian sobre la imagen o la escultura de la persona enfocada, como a veces se escribe en un papel especial o en velas rojas, dependiendo de la intensidad de su emisión y la pureza de su amor y sus pensamientos.

Algunas personas piensan que, para que los hechizos de amor funcionen realmente, deben memorizarse algunos cantos que riman; no es cierto, porque basta con saber unas pocas palabras o líneas especiales. Lo más importante es la imaginación, en la que se siente al amante delante de uno. Además, para percepciones más poderosas se puede sentir físicamente al amante como si se tuviera en los brazos.

La forma más básica de realizar el hechizo es frotando el aceite en las manos y en la piel de los brazos. Seguidamente, de manera opcional, se debe echar perfume en las manos y en la habitación. Una vez hecho esto se debe recitar lo siguiente, mientras se mira la fotografía del hombre deseado:

Tener a un hombre a mis pies es mi deseo,

pero no a cualquiera, sino a ti,

a quien ahora entrego en caricia divina mi amor puro.